Bogotá, marzo 2025; La floricultura colombiana sigue ganando reconocimiento a nivel internacional, no solo por la belleza y calidad de sus flores, sino también por su firme compromiso con la sostenibilidad y la inclusión social. Iniciativas dentro del sector demuestran como la sostenibilidad hace parte de la cadena productiva de las Flores de Colombia. Un claro ejemplo de ello es Falcon Farms Flores Isabelita, una empresa ubicada en el oriente antioqueño que a inicios de este mes fue galardonada por Zero Project, organización internacional que promueve los derechos de las personas con discapacidad.
El programa ganador el cual refleja el compromiso del sector fue «Tan Diversos como las Flores», una estrategia innovadora que fomenta la atracción de talentos diversos, incorporando a personas en situación de discapacidad en distintas áreas laborales permitido la creación de entornos laborales accesibles mediante ajustes razonables en los puestos de trabajo, procesos de capacitación personalizados y el desarrollo de habilidades alineadas con las capacidades de cada individuo.
Desde su implementación en 2016, más de 400 personas en situación de discapacidad han hecho parte de la estrategia, actualmente, la empresa cuenta con 120 talentos en situación de discapacidad de una base de 700 trabajadores, convirtiendo este programa en un modelo replicable y sostenible para cualquier empresa del sector floricultor.
De acuerdo con Anny Martínez, directora de Excelencia Operacional en el sector, “visibilizar estas prácticas contribuye a cerrar brechas sociales mediante un modelo de empleabilidad sostenible basado en la atracción de talentos diversos, al mismo tiempo que se suplen las necesidades de mano de obra del sector”. Esta visión resalta el impacto positivo de la floricultura en la transformación de vidas, demostrando que su crecimiento va más allá de lo comercial para convertirse en un referente de responsabilidad social.
El reconocimiento internacional, es reflejo del impacto que pueden generar las empresas cuando combinan excelencia operativa con responsabilidad social. Con más de 200.000 trabajadores formales en el sector, la floricultura colombiana tiene la oportunidad de seguir liderando iniciativas que promuevan la inclusión y la sostenibilidad, demostrando que las flores de Colombia no solo embellecen el mundo, sino que también transformar las comunidades.
